martes, 14 de octubre de 2008

PRINCIPIOS LÓGICOS

**Coherencia y Derivación de los Pensamientos**
A la consecuencia sistemática entre las ideas y pensamientos se le conoce como coherencia.
La inteligencia es una actividad que se ejerce en el tiempo, puesto que los pensamientos, o mejor dicho el pensar, es un proceso de cierta duración durante el cual se van desenvolviendo ideas. Pero entre estas ideas debe existir un enlace tal que no sea puramente mecánico, sino que debe existir una consecuencia sistemática.
Una condición indispensable para que haya coherencia es que la consecuencia sea establecida por una consecuencia inteligente.

· Cabe la pregunta, ¿Pueden existir coherencia o lógica en los pensamientos?
En efecto, no toda la serie de pensamientos es una serie coherente o lógica, ya que puede haber un pensamiento cuyos miembros no guardan entre sí ninguna relación.

Los Disparates
Los disparates se caracterizan porque entre sus elementos no podemos establecer ningún nexo lógico, ninguna "paridad" pues sus elementos son dispares.

· ¿A qué se debe el crecimiento lógico y coherente?
Su crecimiento se debe a un proceso de coordinación y de subordinación de los conceptos mismos entre sí. Si decimos: el "oro y el platino son metales preciosos", queremos significar que entre los objetos preciosos podemos incluir los metales y entre estos el oro y el platino.

· ¿Cuál es la forma más simple en que se presenta una serie lógica o coherente?
La forma más simple en que se presenta la serie lógica o coherente es el juicio, en el cual se establecen relaciones de conceptos del género, como el ejemplo del oro y el platino.
Los “principios lógicos” constituyen las verdades primeras, “evidentes” por sí mismas, a partir de las cuales se construye todo el edificio formal del pensamiento, según la Lógica tradicional. Dentro de una consideración más moderna de la Lógica Formal, los principios lógicos serán los preceptos o reglas “operantes” que rigen toda forma correcta de pensamiento.

El modo de considerar estos principios ha variado a través de la Historia de la Lógica y del pensamiento científico, pero la Lógica Formal ha coincidido en la formulación de cuatro principios lógicos, aunque el cuarto no es aceptado por todos los lógicos. Tales principios son:

1. Principio de identidad.
2. Principio de Contradicción (o Principio de no-Contradicción).
3. Principio de Exclusión del término medio (o Principio del medio excluido o Principio del tercero excluido o Principio del Tercer término excluido)
4. Principio de Razón Suficiente.

Desde un punto de vista psicológico (aunque no desde la Psicología Científica sino de la Psicología Racional), los principios lógicos serían las leyes generales de “operación del pensamiento”, es decir, las leyes que fundamentan los procesos lógicos.

Desde un punto de vista ontológico o metafísico, estos principios serían las determinaciones más generales del “ser” aún más generales que las categorías.

Pero desde un punto de vista estrictamente lógico, sólo pueden ser considerados como las proposiciones fundamentales que cimientan toda otra proposición en el pensamiento “formalmente” correcto.

EL PRINCIPIO DE IDENTIDAD.
El principio de Identidad fue formulado por primera vez como parte de una teoría de la realidad del “ser”. Ese principio afirmaba algo tan general como que “El ‘ser’ es”; esto puede ser explicado diciendo que “todo objeto es idéntico a sí mismo”. Estas afirmaciones no son todavía lógicas, pero con el tiempo, se reflexiono sobre las implicaciones lógicas de ese principio, logrando la formulación lógico-formal del primer principio.

Esa formulación consistió en la afirmación de la verdad de un juicio cuyo objeto sea idéntico al predicado (ese tipo de juicio se ha llamado “juicio analítico”). El primer principio lógico se ha resumido con la fórmula:

“A es A”

EL PRINCIPIO DE CONTRADICCIÓN.
Este principio ha sido llamado tradicional e incorrectamente “principio de contradicción”, cuando lo que se enuncia es la imposibilidad de contradicción en el pensamiento. Se trata del principio fundamental de la Lógica clásica que descarta cualquier posibilidad de contradicción en el pensamiento y en la realidad (esta implicación ha sido y es uno de los obstáculos más fuertes que ha encontrado toda consideración dialéctica de la realidad y el pensamiento).

La forma más plena del segundo principio es la que se refiere a la no-contradicción entre dos juicios, tal como se expresa en la fórmula:

“’A es A’ y ‘A no es A’ no son ambos verdaderos”

que se lee: El juicio ‘A es A’ y su contradictorio, el juicio ‘A no es A’ no pueden ser verdaderos a la vez.

La forma original de este segundo principio es también ontológica y se formulaba de la siguiente manera: “El ser es y no puede a la vez no ser”.

EL PRINCIPIO DE EXCLUSIÓN DEL TÉRMINO MEDIO. (Tercer Excluido)
Como un complemento necesario del principio de no contradicción, se formula el principio de exclusión del término medio. En su forma original, se refería también a una estructura de la realidad y consistía en la afirmación de que no hay término medio entre el “ser” y el “no-ser”.

En su forma lógica, este principio debe entenderse como afirmando que dos juicios contradictorios no pueden ser ambos falsos, tal como se sintetiza en al fórmula:

“’A es A’ y ‘A no es A’ no son ambos falsos”
que se lee: El juicio ‘A es A’ y su contradictorio, el juicio ‘A no es A’ no pueden ser falsos a la vez.

EL PRINCIPIO DE RAZON SUFICIENTE.
Este es, de los cuatro principios lógicos, el más discutido, pues no todos los lógicos clásicos lo acepten. Su formulación fue muy posterior a la de los otros, pues mientras los primeros tres se atribuyen a Parménides de Elea –quien vivió en el siglo V antes de nuestra era-, el cuarto principio fue formulado por Gottfried Wilhelm Leibniz aproximadamente en 1666, en plena Edad Moderna. El cuarto principio se enuncia:

“Nada es sin una razón suficiente”.

Christian Wolf en 1712 distinguió entre tres modos de entender este principio:

a) Como “razón de ser”,
b) Como “razón de llegar a ser”
c) Como “razón de conocer”.

Dentro de la Lógica tradicional, se ha entendido este cuarto principio en el tercero de los significados que propuso Wolf. Desde ese punto de vista, el principio puede ser formulado:

“Todo conocimiento tiene que estar fundado”.
Compilado por: Prof. Ana María Camargo

Concepciones de la Lógica





La Concepción Aristotélica

Partiendo de que corresponde a Aristóteles haber sido el primero en tratar con todo detalle la lógica, se le considera pues ser su fundador. En un principio se llamo Analítica, en virtud del titulo de las obras en que trato los problemas lógicos. Mas tarde los escritos de Aristóteles relativos a estos eventos fueron recopilados por sus discípulos con el titulo de Organon, por considerar que la lógica era un instrumento para el conocimiento de la verdad.

Es posible probar y demostrar que un conocimiento es verdadero, es decir, que tiene una valides universal. Aristóteles encuentra el fundamento de la demostración en la deducción, procedimiento que consiste en derivar un hecho particular de algo universal. La forma en que se afecta esa derivación es el silogismo, por cuya razón la silogística llega a ser el centro de la lógica aristotélica.

De acuerdo con la escuela socrática, considera que mediante el concepto, es decir, con la idea general, el espíritu aprovecha la realidad, la naturaleza eterna y absoluta de las cosas. Por consiguiente, la definición de un concepto debe suministrarnos la esencia del objeto, el conocimiento complejo de dicho concepto. Se llega a la definición mediante el razonamiento, que es el encadenamiento de las ideas. Como los conceptos son la realidad, el encadenamiento que se estables en nuestro pensamiento entre los conceptos corresponde a las relaciones de la realidad misma.

La Concepción Baconiana

Leonardo da Vinci (1452 – 1519), Johann Kepler (1571 – 1630) y sobre todo Galileo Galilei (1546 – 1642). Bacón mismo, con toda modestia, declara que no es un guerrero de la nueva cruzada, sino un simple heraldo que estimula al combate. Pero esto no quita importancia a su obra, puesto que recogió los pensamientos y las esperazas de su siglo, que vio nacer una ciencia nueva. Si es cierto que no contribuyo a su fundación, predijo, en cambio, que la nueva ciencia, fundada en la experiencia, influiría sobre la vida humana, porque "saber es poder".

Esta concepción considera que la ciencia es el instrumento más eficaz para que las fuerzas de la naturaleza se vuelvan útiles al hombre. Los hechos de la naturaleza deben ser observados con imparcialidad y con objetividad. Bacón critica los métodos antiguos, que considera falsos, puesto que suponen al espíritu humano demasiado sublime para descender a hacer experiencias, bastándole arrancar la verdad de su propio fondo.
¿De que trata Bacón en su libro "Novum Organum"?
Trata de combatir rudamente al silogismo aristotélico, sosteniendo que este instrumento es incapaz de suministrar nuevos conocimientos, puesto que esta minado por un vicio sofistico, toda vez que, sé es falsa la conclusión, por lo tanto, un nuevo instrumento, en nuevo órgano. Ese órgano es la inducción que desempeña en la investigación de las nuevas verdades científicas el papel principal.



¿De que trata la obra de Stuart Mill, titulada "Sistema de Lógica Deductiva e Inductiva"?
Esta obra no solo aspira a una fundamentación psicológica de la lógica, sino que acentúa el punto de vista metodológico. Es la primera formulación de la doctrina de los métodos donde se tiene en cuenta las necesidades y resultados de las ciencias especiales. Por esta razón, define Stuart Mill la lógica como "la ciencia de las operaciones intelectuales que sirven para la estimación de la prueba". Esto quiere decir que es el procedimiento general, que va de lo conocedor a lo desconocedor, y de las operaciones auxiliares de esta operación fundamental. Como se ve, es una lógica real que tiene por objeto el hecho y no las ideas o las leyes a priori.



El idealismo presenta dos formas:
El idealismo subjetivo y el idealismo absoluto, objetivo o lógico. El idealismo subjetivo o psicológico sostiene la tesis de que toda realidad esta encerrada en la conciencia del sujeto. Las cosas no son más que contenidos de conciencia. El idealismo absoluto o lógico toma también como punto de partida la conciencia, pero considera solamente los juicios como un sistema objetivo de juicios, pensamientos, es decir, los elementos lógicos. Los objetos son engendrados por el pensamiento, es decir, que de ellos solo tenemos conceptos, ideas. Por esta razón, se ha llamado al idealismo absoluto o lógico, también panlogismo, puesto que reduce toda la realidad a algo lógico.



El concepto de Benedetto Croce.
Croce identifica, en primer lugar, el concepto con el juicio y con el silogismo. Por esto su lógica es "la ciencia del concepto puro". El concepto es lo universal; por consiguiente, no es representación ni condensación de representaciones, puesto que toda representación es individual.



Este círculo lucha con la metafísica y a favor de una ciencia unitaria, como lo ha hecho en el Congreso Internacional de Filosofía Científica reunido en Paris en 1935. Sin duda, como dice Alfred Stern, no es difícil probar que la filosofía especulativa no es mas que un verbalismo insensato cuando se trata de una metafísica como la de Martín Heidgger, quien descubre que "la nada engendra la negación" y que plantea este problema aparentemente profundo: "¿La nada existe porque hay negaciones o al contrario existe la negación porque existe la nada?

Compilado por: Prof. Ana María Camargo